TEMA 7
LA GENERACIÓN DEL 98:
BAROJA, UNAMUNO Y AZORÍN
El siglo XIX termina con una
grave crisis provocada por el final del imperio colonial español, España pierde
Cuba, Puerto Rico y Filipinas y este acontecimiento provocó una ola de
frustración y protesta que se manifestó en literatura a través de los
escritores de la Generación del 98,
cuyos principales componentes fueron Miguel de Unamuno, Pío Baroja, Azorín,
Antonio Machado y Valle Inclán. Todos ellos adoptaron una actitud crítica ante
la situación política y social del momento e inician un camino innovador
alejándose del realismo y buscando la expresión de la realidad personal e
interior bajo la influencia de la filosofía pesimista de Schopenhauer.
Características de la nueva novela
·
El espacio y el tiempo están poco definidos.
·
La novela se centra en el mundo interior del
protagonista.
·
El protagonista suele ser un artista bohemio,
inadaptado, antiburgués, degradado, en busca de valores auténticos en una
sociedad envilecida. Es frecuente que el fracaso lo lleve a la destrucción
total.
·
La narración suele fragmentarse en estampas:
selección de momentos significativos mezclados con reflexiones.
·
Reaparición de la novela dramatizada o dialogal
(el narrador cede la voz a los personajes).
·
El pesimismo, derivado de la influencia de
Schopenhauer, es muy significativo.
Destacamos la obra de los
novelistas de la Generación del 98: Pío Baroja, Unamuno y Azorín.
Pío Baroja
Baroja defendió una novela
abierta y proclamó la libertad absoluta para el escritor. Para él, la novela es
un género en el que cabe todo: desde la reflexión filosófica o psicológica a la
aventura, la crítica o el humor.
Sus novelas se caracterizan por
los siguientes rasgos:
-
Los protagonistas son, por lo general, seres
inadaptados, que suelen fracasar en su lucha vital.
-
Hay gran cantidad de personajes que luego
desaparecen sin dejar rastro.
-
Diálogos abundantes de carácter sencillo y
verosímil.
-
Una gran maestría en la descripción.
-
Marcada presencia del narrados a través de
comentarios y reflexiones.
Él mismo organizó sus novelas en trilogías y en su
producción pueden distinguirse dos etapas.
1) Primera etapa:
se caracteriza por la variedad temática. Incluye:
- Camino de
perfección: su protagonista, Fernando Osorio, oscila entre el sufrimiento y
la abulia, pero después de la aceptación de la naturaleza consigue fuerza y
vitalismo.
- Las trilogías Zalacaín
el aventurero, Las inquietudes de Shanti Andía y La lucha por la vida (que
incluye La busca, historia que se
centra en la caída de Manuel en el mundo de la delincuencia y sus en sus
andanzas por Madrid), constituye un fiel reflejo de la sociedad
madrileña de principios de siglo y narra la lucha de “los de abajo” por subir y
“los de fuera” por entrar en la ciudad.
- El árbol de la
ciencia: refleja la desesperanza moral y la desorientación de la España de
la época. Narra la vida de Andrés Hurtado hasta su suicidio.
2) Segunda etapa:
en ella predomina el relato de trasfondo histórico y la perspectiva irónica.
Destacan:
-Memorias de un
hombre de acción que cuenta las aventuras de un antepasado del autor,
Eugenio de Avinareta, conspirador y guerrillero del siglo XIX.
Miguel de Unamuno
Sus novelas se centran en el conflicto íntimo de los
personajes provocado por sus relaciones familiares. Temas:
-
La afirmación de la personalidad.
-
La lucha contra el instinto.
-
El deseo de dominio sobre los demás.
-
La muerte.
-
La existencia de Dios.
Principales novelas:
-Niebla (subtitulada
nivola, nombre que el autor daba a
sus obras por considerarlas distintas). En ella utiliza el conocido juego
vida-literatura: Augusto Pérez, el protagonista, se enfrenta con su creador en
un ambiente de confusión entre lo que es verdad y lo que es ficción.
-Abel Sánchez: la
base de esta novela es la lucha entre dos hermanos siguiendo la historia
bíblica del conflicto fratricida de Caín y Abel.
-La tía Tula:
presenta una protagonista fuerte frente a un hombre débil y tiene como tema
central las ansias de maternidad de una mujer virgen.
-San Manuel Bueno,
mártir: en esta obra aparecen todos los motivos que ya habían aparecido en
sus obras anteriores: la lucha agónica del individuo en este mundo, la soledad,
los problemas de la fe, el creer y el aparentar creer,… Cuenta la historia de
un cura rural que ha perdido la fe, pero aparenta tenerla para que sus feligreses
mantengan intactas sus creencias religiosas.
José Martínez Ruíz
“Azorín”
En sus primeras obras se observa una violenta rebeldía
contra los valores establecidos y una conciencia social vinculada al
anarquismo, pero después evolucionó hacia el conservadurismo.
Azorín creó unos textos que difícilmente pueden
considerarse novelas ya que prácticamente borra las fronteras entre el ensayo y
la novela. Las principales características de su estilo son la precisión y la
claridad de ahí el empleo de la palabra justa y de la frase breve; en sus
descripciones se presta atención al
detalle y se anulan el movimiento y el tiempo: la narración se fragmenta en
instantáneas que forman cuadros o fotografías que dispersan la atención del
lector. Sus obras se pueden clasificar
en:
a) Novelas en las que predominan los elementos
autobiográficos:
-La voluntad: el
protagonista es Antonio Azorín, un ser pasivo, contemplativo, pesimista y falto
de voluntad. -Antonio Azorín: su
protagonista ha aprendido a convivir con la realidad y ha encontrado su fuente
de energía en el ideal literario.
-Las confesiones de
un pequeño filósofo.
b) Novelas que suponen un cambio: no hay elementos
autobiográficos y aparece la descripción del paisaje:
-Don Juan: basada
en la conversión cristiana del mito.
-Doña Inés:
situada en el género de la novela rosa de la época.